Porque San Marcos se respeta
Los problemas que viene atravesando la Universidad Nacional Mayor de San Marcos me ha enseñado, en este segundo año de carrera el gran valor de la universidad pública. Nosotros, como estudiantes, recibimos una educación que proviene del Estado. tal vez de nuestro bolsillo no salga un gran dineral para costear nuestra formación profesional pero somos conscientes de que quien asume eso es el país entero. Nosotros, como estudiantes, sabemos que tenemos una deuda social que será retribuida a largo plazo. Nosotros, como estudiantes, sabemos de valores políticos, éticos y humanos. Nosotros, como estudiantes, no vamos a permitir la estadía de personas que van en contra de principios de legitimidad y representatividad.
Entonces, ¿pretenden que, frente a autoridades corruptas, nos quedemos de brazos cruzados y hagamos oídos sordos limitándonos a sentarnos en una carpeta e ir a escuchar clases despegados de la realidad? ¿Cómo podemos quedarnos tranquilos sabiendo que si no hacemos nada, peligra nuestra carrera y la institucionalidad de nuestra querida universidad?
Esa deuda social, de la que hablé líneas arriba, no debe esperar cinco años de carrera para que podamos pagarla. Es ahora que nosotros, como estudiantes, nos unimos a docentes y trabajadores, haciendo a un lado nuestras diferencias, y enfrentándonos a un personaje que viene causando descontento y vergüenza a la comunidad sanmarquina y al país entero. Para que los nuevos ingresantes reciban una universidad verdaderamente científica, para poder cumplir con nuestro rol en la sociedad.
La educación no es un juego ni una fuente de ingreso extra para señores como Pedro Cotillo que vulnera la democracia y el debate universitario. La educación es un derecho que debe ser cumplido a cabalidad, con transparencia y brindando las herramientas necesarias para el desarrollo profesional del estudiante, alejado de conductas inmorales y actos corruptos.
Por eso, desde el 04 de enero, exigimos la salida de Pedro Cotillo y el reconocimiento de la nueva rectora Antonia Castro elegida mediante Consejo Universitario por el bien, crecimiento y, sobre todo, institucionalidad de la Decana de América. Porque San Marcos se respeta. Fuera Cotillo y su camarilla de corruptos.
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